¿Qué es la postboda y dónde la puedes hacer?
Nuestra vida está hecha de recuerdos, y siempre queremos recordar los momentos más significativos que vivimos, que son los que crean realmente nuestra historia. La boda es uno de los más importantes que tendremos jamás. Pero, ¿te gustaría tener un recuerdo original y diferente de ese momento tan especial? Nosotros te proponemos una sesión de postboda en nuestros jardines, ¿sabes en qué consiste y las posibilidades que te ofrece? Si es que no, sigue leyendo y seguro que estarás deseando realizarla con tu pareja.
¿Qué es la postboda?
La postboda es una sesión de fotos que se suele hacer el día siguiente del enlace, unos días después o tras la luna de miel (aunque se puede hacer incluso meses después de la boda, no es aconsejable dejar pasar tanto tiempo).
La sesión se realiza con los trajes de novios puestos y en una localización elegida por el reciente matrimonio o, en su caso, recomendada por el fotógrafo. Suele durar un par de horas, y dependiendo de las circunstancias, las preferencias, los gustos, la imaginación, etc., tiene infinidad de posibilidades. Al hacerse después de la boda, la sesión se realiza sin ningún tipo de estrés añadido y con más tranquilidad que el día del enlace, lo que te ayudará a soltarte más, ser más espontáneo y más imaginativo.
Una recomendación: aunque contrates una sesión de postboda, no dejes de contratar la convencional del día de la boda, o de la preboda, porque al ser momentos diferentes de ese día tan especial, los resultados serán también muy diferentes.
¿Dónde hacer la sesión de fotos de postboda?
Como hemos dicho anteriormente, no hay un lugar ni un momento determinados ni prefijados para realizar la sesión, esa idea iría en contra de lo que significa realmente la sesión de fotos de postboda. Lo que se busca es tener un recuerdo original, imaginativo, diferente de ese día tan especial, por eso, la localización variará y dependerá de los gustos y preferencias de los novios.
Existe una opción llamada “trash the dress” (en español “tirar el vestido a la basura”) que invita a la creatividad y la espontaneidad, con el objetivo de tener para siempre un recuerdo muy original, diferente o divertido de nuestra boda. No consiste en tirar a la basura el vestido de novia (o de novio) literalmente, sino en no tener miedo de que se ensucie, se moje o se rasgue. Esta opción te ofrece infinidad de posibilidades para ser creativos ya que, sin el temor de que el vestido se estropee, puedes hacer la sesión de fotos en cualquier localización que se te ocurra, que tenga un significado importante para ti o simplemente, te apetezca porque lo encuentres divertido o romántico, como por ejemplo:
- nuestros jardines
- un bosque
- un campo de lavandas,
- metidos en el mar o en una piscina,
- en medio de la gran ciudad con el tráfico, lo gases, las aglomeraciones de peatones, etc., que con el contraste de los trajes de boda ofrece una estampa de modernidad y movimiento que quedará plasmado para siempre,
- en un granja, rodeado de animales o subidos en un tractor, por ejemplo,
- o en un lugar interior, no tiene por qué ser en exteriores,
- etc.
Como ves, las posibilidades de que tu sesión de fotos de postboda quede sofisticada, original, divertida, romántica, peculiar, etc, dependerá de ti y de tu pareja, y además será un recuerdo que guardaréis toda tu vida.